La historia del sándwich tiene origen en el siglo XVIII. Donde un conde, John Montagu, IV conde de Sándwich. Pasaba horas y horas ante una mesa de juegos y para calmar su hambre, pidió un poco de carne entre dos rebanadas de pan ya que no le gustaba ensuciar sus dedos. A aquel tentempié se le acabo llamando sándwich en su honor.
Ya se dice que, entre dos panes todo sabe mejor, y con el Rey del Pulpo es éxito seguro.
Anímate a preparar este sabroso sándwich de pulpo y rúcula.
1 paquete de pulpo cocido el Rey del Pulpo
4 rebanadas de pan de molde
Rúcula
4 lonchas de queso
Aceite de oliva virgen extra o mantequilla
Crema balsámica de Módena
Acompáñalo con unas patatas fritas. Para que queden perfectas, fríelas en dos tiempos. Una vez peladas y cortadas las patatas, las freímos en abundante aceite de oliva a fuego suave. Retiramos y escurrimos bien y dejamos que se enfríen durante unos 10 o 15 minutos. A continuación, subimos el fuego, y cuando esté bien caliente volvemos a introducir las patatas hasta que estén bien doraditas. Así conseguiremos que queden tiernas por dentro y muy crujientes por fuera.
También puedes elaborar un alioli casero para incorporar a tu sándwich de pulpo y rúcula. Le dará un toque fresco y muy sabroso.
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